Comprar el salvaescaleras perfecto

¿Tiene problemas de movilidad dentro de su propia vivienda? ¿Subir a la planta superior en su hogar o bajar al sótano se ha convertido en una dificultad para usted? ¿Está pensando en cambiar de vivienda para solucionar estos problemas?

No se preocupe, hay múltiples soluciones, rápidas y sencillas para que su vivienda vuelva a ser cómoda y agradable. Mediante la instalación de un salvaescaleras puede conseguir nuevamente la independencia dentro de su propio hogar, pero antes de iniciar el proceso de compra debe tener en cuenta varios aspectos para que la elección final sea totalmente satisfactoria y se adapte a sus necesidades.

Hay múltiples posibilidades y diferentes modelos de salvaescaleras para solucionar prácticamente cualquier problema de accesibilidad, por lo que hay que ir paso a paso hasta dar con el que se adapte totalmente a cada situación particular.

Lo primero que debe valorar es si va a ser utilizado por personas discapacitadas o simplemente por personas con movilidad reducida (personas en sillas de ruedas, embarazadas, personas que temporalmente han visto mermada su capacidad de movimiento… etc)

Las sillas salvaescaleras suponen una solución perfecta para personas con movilidad reducida, ya que les proporciona total libertad de movimiento, su instalación es muy rápida y sencilla, y son totalmente seguras y fiables.

Ese tipo de sillas se pueden adaptar a cualquier tipo de escalera, por complicada que sea, y se pueden instalar tanto en el interior de la vivienda como a la intemperie.

En la misma línea pero pensando en usuarios discapacitados y en silla de ruedas, existen las plataformas salvaescaleras, que ofrecen también la máxima versatilidad, adaptándose a escaleras rectas y curvas y a instalación para interior o intemperie.

Por supuesto, el precio también es una cuestión importantísima y en el coste final influyen muchos factores: el tipo de escalera, las características de cada modelo, la dificultad a la hora de la instalación…

Por ejemplo hay que tener en cuenta que la fabricación de una silla salvaescaleras para una escalera curva se realiza totalmente a media, por lo que es un producto exclusivo y con unos costes de fabricación que pueden ser muy variables. Por ello, el cliente debe ser consciente de que está adquiriendo un producto totalmente adaptado a sus necesidades y que le va a aportar un incremento importante en su calidad de vida, con lo que quizá la inversión en sí puede tener una importancia relativa.

Quizá inicialmente pueda parecer un producto caro, pero una vez que lo tenga instalado en su vivienda y disfrute de la independencia que le proporciona, estará totalmente satisfecho y orgulloso de la decisión tomada.

Otra cuestión que se puede plantear es la ocupación del salvaescaleras en la escalera. Mientras el salvaescaleras no está en uso, puede permanecer plegado, ocupando un espacio mínimo en la escalera y permitiendo que ésta se utilice con total normalidad. Incluso en algunos casos puede girarse 90º o 180º en la parada superior o inferior de forma que el salvaescaleras se guarda sin molestar absolutamente nada al acceso a la escalera. Por tanto, no supone prácticamente ninguna pérdida de espacio ni de usabilidad en la propia escalera.

También tendremos dudas sobre la seguridad de uso de estos equipos, porque hay que tener en cuenta que van a ser utilizados por personas y deben ser totalmente seguros. Y así es. Todos los salvaescaleras tienen que tener su Certificado de Homologación CE, con lo que nos aseguramos que cumplan con todos los requisitos de seguridad que exige la ley. Por ejemplo, si se produce un corte de suministro eléctrico o una avería durante el funcionamiento del equipo, disponen de baterías de emergencia que ayudarán a terminar el recorrido sin perjuicio para el usuario, o en otros casos, incorporan una palanca de emergencia que devuelve el salvaescaleras al punto de partida.

Una vez que hemos seleccionado el salvaescaleras que se adapta a nuestras necesidades, que tiene el precio adecuado y que cumple con la normativa legal, llega el momento de la instalación en nuestra vivienda.

En un paso previo a la instalación del salvaescaleras, un técnico cualificado de la empresa con la que finalmente ha decidido la contratación del equipo, visitará su vivienda midiendo cuidadosamente la escalera y teniendo en cuenta todas las consideraciones necesarias para que posteriormente el proceso del montaje sea lo más rápido y sencillo posible.

Para la instalación de los salvaescaleras no es necesario adaptar ni alterar en nada la configuración de su escalera. Normalmente, las guías se atornillan a los escalones y/o a la pared y se procederá con todo el cuidado necesario para que los peldaños no sufran ningún desperfecto.

En general, el proceso de instalación y montaje de los salvaescaleras es muy rápido y, exceptuando el caso de escaleras muy largas o complicadas, se finaliza en un día o dos.

¡Ya tiene su salvaescaleras instalado! Ahora sólo queda utilizarlo y disfrutar de la libertad que le proporciona.